De cómo cruzo de nuevo el Atlántico ya con él a mi lado y no sólo en pensamientos cardiovasculares que avivan mis células enamoradas… De cómo pretendo comparar la inmensidad del océano con la intensidad del sentimiento que me revoluciona… De cómo en esta sala de espera produzco, inspirada, metáforas antes de abordar el tren de sueños que representa su existencia… De cómo concibo cualquier manera para estar a su lado y voltear a mirarme en sus ojos… De cómo me fascino infinitamente con cada ápice de su inteligencia apasionada que me reta dulcemente a descubrir mejores versiones de mí… De cómo saltamos, orgullosos y sonrientes, el abismo etario que al común sorprende… De cómo me pregunto qué relación tuvimos en vidas pasadas… De cómo agradezco conocerle… De cómo sé que me he enamorado porque no deseo poseerle, porque acepto cada milímetro de su actuar, porque mi piel grita su nombre y sólo se calla, extasiada, cuando siente su presencia. Acuérdome de mi padre cuando t...

 Estoy comprendiendo tantas cosas que jamás imaginé… Es una cadena tan hermosa, todo esto por mí, por ti, por nosotros, por ellos, por todos, porque somos la parte y el todo!     De cómo los PATRONES que asumimos como conducta están incondicionalmente ligados a la acepción de la misma palabra en un contexto rural que denota una figura de mando y por ello “poseedor de la última palabra”… ¿Cómo denominamos esta interacción? No lo sé, esta vez ni siquiera dudo como cuando no sabía si era anagrama.      Lo que quiero saber es ¿cómo hemos denominado al hecho de tener dos significados “diferentes” para una misma palabra? (Hice una pausa, escribí la pregunta en Google  y obtuve: “Homonimia: ·          Suenan igual. Palabra  homónimas  son aquellas que suenan igual pero que sus significados son diferentes. Clases de palabras homónimas. ·          H...

Escucho otros acordes, otras palabras, me estremezco…  En su voz reconozco la maravillosa comunicación del ser, del llamado que responde a la conexión eterna, infinita… Tu corazón a punto de estallar te hace dejar de escribir por un momento, acariciarte las orejas… Suspirar. Codos en mesa y manos en cara, me respiro y sonrío mientras me conmuevo ante un universo, te escucho, cierro mis ojos y tu melódico mensaje me seduce hasta hacerme danzar   hasta que, de pronto, las voces ausentes entonan el susurro de la duda… ¡Oh Maquiavelo! Cambio los acordes de nuevo, el piano… Mi abuela…  Pretendo organizar, son muchos y consciente estoy que, por diferentes y alejados que puedan parecer, están conectados y entonces me voy en ese camino de redes, células, conexiones, verbo y silencio… Me voy, ¡No! No lo hagas. ¿Por qué? Sólo dime por qué y luego vete.  ¡Hey!  ¿Qué pasa?  ¿Nostalgia?  ¿Tristeza?  ¿Por qué?  ¿Porque te fuiste a tu infancia, a ese...

De cómo sigues escribiendo en Aeropuertos; esta vez nacional donde ya no es la primera vez que te pagan el boleto, poco a poco vas… Esto de usar el Monroe es un tributo más que a ti… A mi abuela, tal como tú lo tomaste de ella, hoy lo tomo yo de ti! Me impresiona, pero sin dudas… Los hombres las prefieren rubias, mi estimada! Todos escriben, piden fotos, comentan, dicen “Me gusta”, preguntan acerca de la certeza de mi existencia y yo… Entendiéndote a cada minuto, sonriéndome con tu recuerdo, sintiéndome satisfecha con tu sabia manera de manejar los medios, tanto, hasta inmortalizarte…  Sin dudas…  Se preguntan si uno es real, y al final no es eso la fama?  Una mentira que bien llevada nos hace aún más reales!   Claro tengo mi origen,  y sin caer en estigmas… No difiere mucho el dolor que pudimos haber tenido en nuestra infancia, pero hoy día (Confío en que también llegaste alguna vez a este momento) doy gracias por todo lo vivido, porque estoy fe...